Javier Vázquez Delgado recomienda: 100% Marvel HC. Veneno: Pira funeraria / La locura

Edición original:Marvel Comics, Venom: Funeral Pyre 1-3 y The Madness 1-3 USA.
Edición nacional/ España:Panini Cómics, 100% Marvel HC. Veneno V1 2.
Guion:Carl Potts, Ann Nocenti.
Dibujo:Tom Lyle, Kelley Jones.
Entintado:Al Milgrom, Scott Hanna,Joe Rubinstein, John Beatty, Tom Smith.
Color:Ed Lazellari.
Formato: Tomo Cartoné (160 pp).
Precio:20,00 €.

Veneno: Pira funeraria.

Veneno y El castigador juntos. Con esta premisa sabemos en qué pantano nos metemos. Dos antihéroes, dos formas de entender la protección del inocente lejanas a los cánones y arquetipos de otros héroes como Spiderman o el Capitán América.

Peleas, disparos, aventura y acción. Un buen ejemplo de un cómic noventero. Si bien debemos decir que no es un comic malo, puesto que, sin buscar grandes premisas o un trasfondo complejo, cumple su objetivo: ser entretenido.

¿Es algo particularmente profundo y significativo? No. ¿Es una historia divertida que probablemente complacerá a las personas que buscan un divertido y emocionante cómic de superhéroes? Si. Las escenas de acción son bastante impresionantes y también constituyen la mayor parte de esta miniserie.

Tom Lyle, como dibujante de Spiderman, fue uno de los artistas que participó en varias sagas de los noventa como la “Saga del Clon” y “Matanza Máxima”, desarrolladas en los diferentes títulos del personaje. Durante este tiempo, diseñó el traje original de la Araña Escarlata. Asimismo, es reconocido por su trabajo en la miniserie Robin (1991) y sus respectivas secuelas Robin II: The Joker’s Wild (1992) y Robin III: Cry of the Huntress (1993). Sus trazos lo convirtieron en uno de los artistas favoritos del arácnido. Tom Lyle falleció el 19 de noviembre de 2019, y desempeñaba su labor como profesor en el Savannah College of Art and Design. Particularmente, sus dibujos siempre fueron del agrado de este redactor, y Pira Funeraria sería menos impactante sin la labor que desempeñó. El colorista Ed Lazellari hace una gran labor con colores intensos que hacen que el dibujo de Lyle sea muchísimo más impactante.

En general, es un buen cómic, predecible, pero entretenido. Si quieres una obra maestra profunda y significativa que te haga pensar en aspectos trascendentales y cambiar tu vida, incluida la forma en que ves los cómics a partir de ahora … busca en otro lado. Si quieres un cómic divertido es cien por cien recomendable.

Veneno: La locura.

El tratamiento de Veneno ha variado ostensiblemente desde los años 90. En aquella época Veneno eran tratado por los guionistas como un antagonista de Spiderman con toques cercanos a la locura. La historia que tenemos entre manos es un claro ejemplo. En ella literalmente Veneno se está volviendo loco con su personalidad dividida en dos. La historia es perfecta para que las riendas las dirija Ann Nocenti, la cual había mostrado su talento con este tipo de acercamientos psicológicos en otros personajes. Los cómics de Nocenti funcionan mejor cuando hay una trama real por la que las personas hablan de forma introspectiva, divagando en la corriente de su conciencia. Nos encontramos con un Veneno totalmente desquiciado. El sufrimiento del mismo trae causa de algún tipo de locura que involucra que oiga múltiples voces (algunas del simbionte, otras no) en su cabeza.


Black Tom Cassidy y el Juggernaut son los enemigos a batir en esta miniserie. Ambos personajes son villanos del elenco de los mutantes, si bien en este caso se cruzan en el camino de Veneno. La situación emocional y psicológica de nuestro antihéroe empeorará, trasladándose a su aspecto visual, viendo una de las versiones de Veneno que más éxito tuvieron en los 90 con su propio muñequito. Aunque parezca mentira se comercializó una figura de acción basada en lo que le sucede a Veneno: enorme y con sus cabezas adicionales.

El arte de Kelley Jones tiene un aspecto vagamente similar al de Sam Keith. La mención de este autor supone pensar en Batman o Deadman, pero también llevó a cabo otros trabajos como el que tenemos entre manos, si bien en Marvel Comics no tiene una bibliografía muy extensa. Su arte se ajusta a la rareza de la serie, pero su abstracción, que le sienta muy bien a Veneno, a veces se torna excesivamente grotesca y fuera de lugar.

Como conclusión se trata de una historia muy distinta a la anterior que contiene este tomo, pero no por ello deja de ser interesante. Para los seguidores de Veneno es un imprescindible, puesto que es parte de su historia, y con el transcurso de los años, si bien el personaje ha cambiado ostensiblemente, no viene mal revisar su pasado y ver qué concepto del mismo se manejaba en los años 90.



Ver Fuente

Comentarios

Entradas populares