Javier Vázquez Delgado recomienda: Infernales 7-8

Edición original: Hellions vol. 1, núms. 7 a 8 USA (Marvel Comics, 2020 – 2021)
Edición nacional/España: Infernales, núms. 7 y 8 (Panini Cómics, 2021)
Guion: Zeb Wells.
Dibujo: Stephen Segovia.
Entintado: Stephen Segovia.
Color: David Curiel.
Traducción: Uriel López.
Realización técnica: Estudio DIN&MITA.
Formato: Grapa. Nº 7 32pp (3,50€) y nº 8 32pp (3,50€).

Los Infernales vuelven a la carga… ¡¡Mejorados!!

“¡A mí, mis Infernales! ¡JAJA!”

En los números anteriores, Zeb Wells y Stephen Segovia nos presentaron uno de los equipos más suicidas, violentos e imprevisibles que puede haber dentro de Krakoa, y su peligro era tal que muchos consideraban tomar medidas extremas con Kaos, Creahuérfanos, Émpata, Nanny, Greycrow y Chico Salvaje. Sin embargo, Mr. Siniestro necesitaba peones para su juego secreto, por lo que convenció al Consejo Silencioso de formar los Infernales y Cíclope colocó a Mariposa Mental como la lideresa del grupo para que mediaría, pusiera a todos a raya y protegiera a su hermano. Con el grupo ya formado, Mr. Siniestro tuvo la brillante idea de querer acabar con uno de sus centros de clonación, aunque los Infernales se darían cuenta más tarde que estaría ocupado por los antiguos Merodeadores y Madelyne Prior. Como es de esperar de un equipo de este calibre, todo comenzó a salir mal y Madelyne estuvo cerca de conseguir su objetivo, pero al final los Infernales salieron victoriosos y quemaron el centro de clonación. Más adelante en el tiempo, nuestros alocados Infernales acabarían viéndose envueltos en una misión suicida hacia Arakko para robar las espadas de los contendientes enemigos, pero Mr. Siniestro tuvo otro plan al encontrarse con Tarn y sus Locus Infames, ya que prefirió robar el ADN de sus enemigos mientras dejaba morir a su equipo o los asesinaba, algunos en Arakko y otros cerca de Krakoa.

En lo referente a este arco argumental, Zeb Wells recupera la trama justo después de X de Espadas y aprovecha el momento para explicar por qué los Infernales sí pueden ser resucitados, a diferencia de otros mutantes que cayeron en Otromundo. Sin duda, podemos decir que la razón para traer de vuelta al equipo es más que acertada y, además, se acompaña de momentos bastante graciosos en el Consejo Silencioso, en el que se demuestra que Emma Frost conoce muy bien el comportamiento de Mr. Siniestro y sus lágrimas de cocodrilo. Ahora bien, si hay algo con lo que el autor nos deja sorprendidos es con las inesperadas habilidades con las que regresan Nanny, Chico Salvaje y el peligro que supone Creahuérfanos -el motor de esta trama-. Debido a todo esto, Mr. Siniestro evita hablar de lo ocurrido en la contienda entre Otromundo y Krakoa y propone que el equipo se arriesgue mortalmente para recuperar la nave de Nanny y una nueva armadura para Creahuérfanos. En este punto, el guionista nos deja con un intenso malestar entre los personajes por la actitud de su “jefe” y Mariposa Mental apacigua a todos a la vez que se nos revela un importante secreto, el cual no dudamos que sea uno de los grandes motores para un argumento posterior. Al llegar cerca de la nave de Nanny, los Infernales lucharon contra La Verdad, formada por Cameron Hodge -su virus tecnoorgánico- y sus secuaces robot (los Sonrisas). Aquí, Zeb Wells muestra una resolución bastante inteligente del conflicto a la vez que nos deja algunos misterios que nos preocupan y pueden poner en riesgo tanto a Krakoa como a los propios Infernales. Por lo tanto, podemos decir que estos dos números son bastante divertidos, ágiles y son lo suficientemente interesantes para que el lector/a quiera seguir explorando el peligroso futuro que rodea a los Infernales.

En cuanto a los personajes, Zeb Wells nos deja momentos bastante relevantes para cada uno de ellos, desde los que perecieron en Arakko en X de Espadas como los que fueron asesinados al llegar cerca de Krakoa. Así, Chico Salvaje y Nanny son los que experimentan los mayores cambios respecto a los números anteriores, siendo estos dos más violentos y sin escrúpulos a la hora de querer lograr su objetivo, sobre todo en el caso de Nanny, cuyo egoísmo puede poner en peligro a Krakoa y a los Infernales. Por otro lado, Kaos continúa sin sentirse integrado dentro del equipo e intenta solucionar todo conflicto de la mejor manera posible, aunque es Greycrow quien realmente se da cuenta del peligro y busca soluciones alternativas, sobre todo cuando se ven cerca de la muerte por un recurso interesante. Mariposa Mental es, sin duda, quien recibe un gran aumento de interés, no solo por las misiones ocultas que recibe, sino también al salir a la luz para el lector la razón por la que ella es tan “leal” a Mr. Siniestro. Acabando con el lado de los héroes, Émpata continúa siendo el mismo chico egoísta e individualista de siempre, pero es aquí donde demuestra una gran astucia para poder derrotar a su enemigo y dejar que sus compañeros puedan cumplir la misión y volver sanos y salvos. Ahora, Mr. Siniestro resalta por ser un personaje muy rastrero, manipulador, egoísta… cualquier calificativo negativo que queráis ponerle, puesto que este miembro del Consejo Silencioso no se preocupa para nada de aquellos a los que lidera y solo busca conseguir lo que él desea, aunque lo oculte a plena vista. Además, su necio intento de parecer preocupado por los Infernales queda muy en entredicho en este número, lo cual es ciertamente divertido por ver cómo se desenmascara él solo con el tiempo. Por último, Cameron Hodge es un villano que causa momentos divertidos al establecer contacto con los Infernales, aunque su peligrosidad hay que tenerla muy en cuenta. Sin embargo, Cameron demuestra no ser demasiado inteligente al chocar con Émpata, subestimarle y no tener en cuenta un factor muy importante para sus secuaces.

Sobre el ritmo, Zeb Wells continúa demostrando su gran estilo para realizar una historia activa, divertida y que consigue engancharte por su humor y ligeros toques intrigantes. Sin duda alguna, el guionista continúa mostrando un efectivo storytelling que no se resiente en ningún momento.

A nivel artístico, Stephen Segovia regresa para mostrarnos un dibujo altamente notable, donde no solo son muy importantes las expresiones faciales y corporales de los personajes a la hora de desarrollar la trama y los personajes, sino también ciertos detalles que plasma en fondos y personajes que aportan una mejor experiencia visual y de trama. Por lo tanto, podemos decir que el dibujante se mantiene en un buen nivel y que muchos lectores/as se sentirán bastante contentos por el esfuerzo que realiza en todo momento.

En definitiva, considero que estamos ante un arco argumental interesante y que merece ser leído, tanto por el increíble trabajo de Zeb Wells y Stephen Segovia, como por ciertos detalles de esta “misión suicida” que generará un gran interés por el futuro a corto-medio plazo para los Infernales y Krakoa. Ambos autores tienen grandes planes para los Infernales, y nosotros estaremos ahí para estar atentos a cómo lo desarrollan con esa gran frescura.

Lo mejor

• Las decisiones que toma Nanny en estos números nos hará teorizar en todo momento sobre las consecuencias que habrá para Krakoa y los mismos Infernales.
• La explicación de la resurrección de los Infernales y el comportamiento de Mr. Siniestro para conseguirlo.
• El secreto de Mariposa Mental.

Lo peor

• Cameron Hodge podría haber dado más de sí, aunque no podemos negar que la ejecución de su pequeña trama ha sido muy buena.

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