Javier Vázquez Delgado recomienda: Generaciones, de Flavia Biondi

Edición original: La generazione (Bao Publishing. Noviembre, 2015)
Edición nacional/España: Generaciones. La Cúpula. Septiembre, 2021
Guion: Flavia Biondi
Dibujo: Flavia Biondi
Traducción: Inés Sastre Mesonero
Formato: Rústica con solapas, 144 páginas. 15’90€

Retrato de varias generaciones con vocación terapéutica

«La vida nos sorprende, papá. Nunca puedes saber quién te tenderá la mano»

A veces una obra te conmueve en el momento más inesperado, te asalta a traición y consigue emocionarte sin que nada te haya preparado para ello; y esto pasa en cierta parte de la obra Generaciones de Flavia Biondi. En este caso se trata de una doble página al final del álbum, sin diálogos ni texto, con tan solo tres personajes sonriendo felices en un paisaje exterior apenas insinuado; es un hermoso dibujo que cierra el círculo, que le acaba dando sentido a todo lo anterior. Y es curioso porque la autora italiana lo ha situado fuera de la trama, cuando ésta ya ha finalizado, con el riesgo de que pase completamente desapercibido para los lectores, que no notemos que es esencial para todo el conjunto… y es quizás por eso que cuando se asimila nos acaba golpeando tan fuerte.

La artista de Ruby Falls, aquí ejerciendo de creadora única, nos presenta un drama amable donde encontramos a Matteo, un adolescente sin oficio ni beneficio, que acaba de volver a su pueblo procedente de Milán. Tres años antes el joven, huérfano de madre, había confesado a su padre que era homosexual y casi inmediatamente se había escapado a la capital para evitar los conflictos familiares. Ahora a su regreso, no se atreve a encararse con él y vive temporalmente con su abuela, tres tías y una sobrina embarazada. Matteo acaba de romper su relación sentimental con Massimo, no tiene trabajo y se siente fracasado. Pero lo que más teme es volver a encontrarse cara a cara con su progenitor…

Biondi teje una trama sencilla, llena de matices, de silencios y de sobreentendidos que acaba desmontando muchos tópicos y se erige en una liviana reflexión sobre el sentido de nuestras vidas. Las relaciones humanas son el centro de la historia que bascula entre la ternura y la angustia con una maestría envidiable y que está perfectamente encuadrada en un contexto contemporáneo donde imperan el desconcierto social y la precariedad laboral.

Como en Tiempos precarios, la autora italiana subraya la importancia del paisaje, del entorno en que transcurren las escenas cotidianas de sus personajes. Sea Bolonia, sea la ficticia aldea de Pontecesello, todos los lugares donde habitan las personas acaban aprisionando a sus moradores con una nada sutil red de influencias, normas, prohibiciones y costumbres que controlan sus movimientos, sus ambiciones, sus deseos e incluso sus miedos más profundos. Y en cierta medida la autora nos demuestra la enorme influencia que ejerce el marco a la hora de escoger libremente nuestro camino. Por ello las secuencias más felices de sus obras, las más libres, las que suponen una revelación para los personajes se desarrollan lejos de las urbes, en paisajes abiertos donde el horizonte nos devuelve nuestra humanidad, nos recuerda nuestra turbadora pero inevitable individualidad.

Es sintomático, además, que a través del cuidado de su abuela enferma, Matteo empiece a encontrar un precario equilibrio en su vida, que se desencadene la cura a su vacío existencial, apoyado fraternalmente por el personaje más centrado de la obra que es, significativamente, un enfermero con el que pasa algunos de los momentos más gratos de su desconcertado presente.
Flavia Biondi es la autora de los instantes dichosos pero fugaces. Porque el “vivieron felices y comieron perdices” es quizás la falacia más grande de todos los cuentos; la dicha no es eterna, ni tan siquiera duradera y nos tenemos que conformar con que a veces sea plena e intensa.

En el apartado gráfico y narrativo, Generaciones está un escalón más bajo que la asombrosa Tiempos precarios, pero también raya a gran altura.
La artista florentina divide sus páginas en dos esquemas distintos que alterna a conveniencia, uno es de tres tiras y otro de cuatro, ambos con dos o tres viñetas cada uno. De vez en cuando se atreve con cuadros más amplios, sobre todo cuando se trata de describir algún paisaje o también en la hermosa secuencia inicial.
La definición de sus personajes es algo esquemática y sin embargo todos son perfectamente reconocibles, con fuerte personalidad propia. El tratamiento de las figuras es algo rígido, pero su acertada descripción de las expresiones faciales y de las posturas de las manos compensa el limitado lenguaje corporal. Su entintado esta basado en la línea delgada, algo nerviosa, irregular y frágil, no abundan las grandes manchas de tinta y rellena los espacios con tramas mecánicas de distinta densidad que domina con maestría. El conjunto es liviano, claro, quebradizo; le falta algo de la exultante elegancia de su extraordinario trabajo artístico en Tiempos precarios, y a diferencia de esta obra posterior, el blanco y negro es puro, sin la componente azulada de la obra ubicada en la ciudad universitaria de Bolonia.

Flavia Biondi (1988) ha nacido en Castelfiorentino, en la provincia italiana de Florencia. Obtuvo una licenciatura en cómic e ilustración en L’accademia di Belle Arti di Bologna. Junto a siete compañeros de facultad fundó la etiqueta de autoedición Manticora Autoproduzioni para empezar a colaborar en varios proyectos colectivos y es allí donde edita su primera antología con el título de Sindrome (2012). En diciembre del mismo año publica Barba di Perle, esta vez con la editorial Renbooks.
Tenebre (2013), realizado junto al ilustrador Francesco de Stena, fue su siguiente trabajo publicado por Manticora con la que vuelve a colaborar en otra antología, titulada Feral Children (2014), con un relato sobre niños salvajes. En 2014 publicó L’orgoglio di Leone, una novela gráfica que transcurre en Siena, Roma y Génova y que está centrada en la temática LGTBI y L’importante è finire (2015), ambas editadas por Renbooks. En 2015 empieza su colaboración con la editorial italiana del perrito, con Bao Publishing, publicando la novela gráfica La Generazione y dos años después estrena, en el mismo sello, La Giusta Mezura que la editorial barcelonesa La Cúpula se ha encargado de traducir al castellano en otoño de 2020, con el título de Tiempos Precarios.

Biondi también ha participado como ilustradora y portadista en Le Piccole Morti (2019), un proyecto colectivo realizado por Manticora. En 2020, se abre camino en el mercado norteamericano dibujando la serie Ruby Falls, con guion de Ann Nocenti y editada por Dark Horse. Su última obra publicada en Italia se titula Le maldicenze (2021) y la edita, como no, Bao Publishing.

La confección física y gráfica de este álbum es buena. El libro es en rústica con sus consabidas solapas, que son marca de casa cuando edita La Cúpula, la impresión es correcta y tiene un papel grueso y mate. El tamaño es el adecuado pero rozando el límite de lo pequeño. La parte buena es que respeta el mismo formato que Tiempos precarios con lo que se potencia la sensación de díptico. Esta edición no contiene ningún tipo de texto introductorio ni extras gráficos y el precio es bastante competitivo.

Con Generaciones la autora italiana Flavia Biondi inició su etapa de madurez que consolidó de manera espectacular con la posterior Tiempos precarios. En esta obra de 2015 demuestra su habilidad para envolvernos en pequeñas vicisitudes que acaban convirtiéndose en reflejo de lo más íntimo y relevante de nuestra biografía y que acaban determinando nuestro futuro. Con Generaciones, la editorial La Cúpula completa este pequeño díptico de historias contemporáneas y humanas. Un par de obras que confirman a Biondi como una de las autoras más interesantes del cómic europeo actual. Esperemos que su incipiente etapa norteamericana como competente ilustradora de textos de otros no la desvíe de su excelente trayectoria de autora global y esperemos que sus siguientes obras sigan estando al alcance del lector en lengua castellana de una manera razonablemente inmediata. Porque realmente vale la pena y todos saldremos ganando.

Salut!

Reseña de Tiempos precarios en Zona Negativa.

Lo mejor

• La acertada descripción del momento sociolaboral actual.
• Su filosofía optimista con grandes dosis de realismo.
• Algunos momentos donde la emoción asoma con gran intensidad.

Lo peor

• Una portada poco vistosa.

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