Javier Vázquez Delgado recomienda: Reseña DC USA – Wonder Woman Historia The Amazons #1

Edición original: Wonder Woman Historia The Amazons #1 (DC Comics, 2021)
Guion: Kelly Sue DeConnick
Dibujo: Phil Jimenez
Color: HiFi, Arif Prianto y Romulo Fajardo Jr
Formato: Prestigio. 72 páginas. 7,99$

Phil Jimenez regresa a Wonder Woman reventando cualquier expectativa

«Keep to the darkness, Hera whispers for the light be your undoing»

Este mes de diciembre se celebra el octogésimo aniversario de la creación de Wonder Woman. Llevamos ya unas cuantas reseñas de especiales y series limitadas que DC ha publicado este año en homenaje a la amazona, pero este este mes será especial en Zona Negativa, este será el mes Wonder Woman. Tendremos un número importante de entradas dedicadas al personaje, reseñas USA, reseñas nacionales y artículos de análisis. Se ha movilizado toda la sección para homenajear al personaje femenino más importante del universo DC.

Y damos el pistoletazo de salida con la presente reseña. Un auténtico número de lujo, con nombres de primer nivel, y uno muy especial vinculado a la Mujer Maravilla, el del legendario Phil Jimenez.

Este primer número inicia una miniserie de tres ubicada en el sello Black Label. Los tres números los ha escrito la guionista Kelly Sue DeConnick (Aquaman, Bitch Planet). Los dibujantes son Phil Jimenez en el primer número, Gene Ha (Top Ten) en el segundo y cerrando la serie tenemos a Nicola Scott (Black Magik).

El número inicial se divide en dos partes. La primera tiene un tono mitológico. En ella vemos como a partir de la petición de Hera y la voluntad de Zeus surgen las amazonas. Se trata de unas páginas espectaculares de Phil Jimenez donde refleja un Olimpo de una manera más vital, orgánica, cruda y espectacular de lo que hayamos visto en mucho tiempo. Sale del dibujo estándar y tópico grecolatino. Aunque no deja de haber referencias a la cultura helena. La segunda parte del cómic es más realista y sin dejar de mostrar una calidad sobresaliente, Jimenez pone el freno de mano a la espectacularidad. Vemos a Hyppolita dar a luz una niña y el desgarro que supone traer una hija a un mundo donde las mujeres son víctimas sometidas.

Kelly Sue DeConnick, como no podía ser de otra manera, pone el énfasis en el sufrimiento de las mujeres en la antigüedad. No es algo nuevo en Wonder Woman, ya hemos visto reivindicaciones parecidas en etapas anteriores. Es de agradecer, como DeConnick refleja la injusticia de manera equilibrada sin caer en un tono aleccionador. El planteamiento de la guionista, expresado por Hera es “no queremos paternalismo, ni limosna, queremos tener las mismas posibilidades que los hombres, queremos seguir nuestro propio camino”. Se trata de una reivindicación feminista difícil de caricaturizar por los de siempre y por tanto, muy necesaria.

Por su parte, Phil Jimenez nos hace un regalo a los lectores y homenajea a la amazona ofreciendo un trabajo apabullante. Recordemos que en sus inicios a Jimenez se le consideraba un clon de George Perez y fue como autor completo de Wonder Woman cuando alcanzó su pico como autor. El dibujante muestra su agradecimiento al personaje ofreciendo su mejor versión. El dibujo es tan bueno que eclipsa el trabajo de DeConnick. Muchos autores caen en una triste decadencia con los años. Por dejadez, desmotivación, pérdida de facultades o problemas de salud lo hemos pasado mal leyendo a dibujantes que fueron top mundiales, como Byrne o Miller. Sin embargo, Phil Jimenez demuestra que está en plena forma y que con ganas y tiempo puede ofrecer un nivel que se sitúa entre lo mejor del año. El diseño de personajes mezcla elementos de la naturaleza (tan presente en la antigua Grecia) y mitológicos, muestra un Olimpo más crudo, vital y puro. La diversidad étnica entre las deidades y amazonas se muestra y fluye con naturalidad. No da la sensación de estar sometida a cuotas y a lo políticamente correcto, sino a una interpretación más elemental y orgánica de la mitología.

Esto no es todo, Phil Jimenez huye del clasicismo en el diseño de página y nos muestra una estructura innovadora, experimental que casa muy bien con la representación que hace de la divinidad. Una representación que mezcla elementos naturales y surrealistas, que nos sumerge en un cierto grado de incomprensión y rareza, como no podría ser de otra manera ante dioses y figuras míticas.

Se le perdona no participar en el especial octogésimo aniversario de Wonder Woman.

Una vez desaparecen las chiribitas de nuestros ojos, podemos hacer un análisis más frío del trabajo de Jimenez. El dibujo recargado convierte cada página en una gozada en la que disfrutar y descubrir decenas de detalles. Muestra las figuras equilibradas, de proporciones clásicas, sin exageraciones, se mueven de manera grácil y natural.

Pero… ay, siempre hay un pero… su excelencia, el esfuerzo titánico y sobresaliente del autor es tan absorbente que puede “tapar” la trama. Es fácil quedar embobado ante el dibujo y prestar menos atención al texto.

No podemos olvidar el trabajo de los coloristas HiFi, Arif Prianto y Romulo Fajardo Jr. En este caso, y no es tan habitual, el color potencia el trabajo del dibujante. La mezcla quita el hipo y da la sensación de que nos encontramos ante la verdadera grandeza de los dioses olímpicos. Además, el color es capaz de bajar el tono y adaptarse al realismo y la crudeza de la parte que se dedica a reflejar elementos mundanos.

Como conclusión, estamos ante uno de los mejores cómics que se han publicado bajo el sello Black Label. Se trata de una explicación del mito de las amazonas en el universo DC mucho más moderna, completa, compleja y diversa, con un dibujo de gran impacto por parte de Phil Jimenez.

Si los dos próximos números mantienen un nivel parecido, estaremos ante una mini serie que recordaremos durante décadas.

Lo mejor

• Phil Jimenez nos hace un regalo que recordaremos por mucho tiempo.
• La naturalidad con la que Kelly Sue DeConnick desarrolla un subtexto feminista.
• Los extras sobre las tribus amazónicas.

Lo peor

• Lo difícil que es poder explicar un dibujo tan excepcional.
• La incertidumbre ante los dos próximos números.

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