Javier Vázquez Delgado recomienda: Academia Titanes #1
Edición original: Teen Titans Academy núms. 1-3 USA
Edición nacional/España: ECC Ediciones
Guion: Tim Sheridan
Dibujo: Max Raynor, Rafa Sandoval
Entintado: Jordi Tarragona
Color: Alejandro Sánchez
Traducción: Bárbara Azagra Rueda
Formato: Rústica, 80 págs. A color
Precio: 8,50 €
En Academia Titanes suspenden tanto alumnos como profesores
«Ni siquiera conozco a la mitad de los chicos que acogimos- Piensas que mordimos más de lo que podemos masticar»
Nuevo cómic de los Titanes tras el final del run anterior de los Jóvenes Titanes y del cómic dedicado al grupo de Estado Futuro. Academia Titanes llega a nuestro país con una interesante premisa, los Titanes adultos van a entrenar a nuevos y jóvenes héroes. Un tebeo juvenil destinado especialmente a su público objetivo que pretende captar al lector del equipo clásico al incluir los personajes en la cabecera, o a los del anterior equipo creativo al estar integrados también los protagonistas de Glass en la escuela para jóvenes con un talento especial.
Tim Sheridan ha colaborado con DC en la división de películas animadas, trabajando en la adaptación de El Largo Halloween o en La muerte de Superman (en este campo también se ha dejado ver en Master del Universo: Revelación). Dentro de la división de cómics ha escrito los volúmenes de Estado Futuro dedicados a Shazam y a los Jóvenes Titanes, bebiendo esta nueva serie de parte de lo expuesto en la iniciativa futura. Con Shazam, el guionista sugiere un interesante camino a explorar en próximos cómics, pero no incide en ello. Billy Batson está presente en esta Academia de Titanes pero su participación es inexistente, ¿aparece siquiera? El guionista, de momento, no le presta ninguna atención. El buen sabor de boca que deja Sheridan en la cabecera del antiguo Capitán Marvel, desgraciadamente, no se ve correspondido por este tomo.
En Academia Titanes los Titanes originales adoptan el papel de mentores de un nuevo grupo de jóvenes destinados a convertirse en héroes. Una premisa interesante ejecutada de la forma más convencional posible y con muy poco brillo en los detalles. Los adultos son profesores benévolos y complacientes, respetados y escuchados porque, ¡son Titanes!¡Qué alumno no se sentiría entusiasmado por poder aprender de Nightwing, Starfire o el resto del equipo! Su autoridad no es real, ni se la han ganado con su manera de impartir clases, no demuestran profesionalidad o responsabilidad por lo que están haciendo, tomándose todo acorde al tono del cómic, de forma ligera, con bromas que pretenden acercar y diferenciar ambas generaciones, realizadas torpemente. Sheridan, en ocasiones, parece darse cuenta de estas carencias, expresándolas a través de Donna con la frase elegida como cita de esta reseña. Esta enmienda, una destacada caracterización y fluir del resto de protagonistas nos harían olvidar la escasa definición de los docentes, pero, en general, no acierta con ninguno de los grupos que trabaja. Los Titanes son despreocupados y no tienen un papel destacado, los Teen Titans están mejor definidos (seguramente porque apenas se les trata) y los nuevos alumnos, sin espacio para explorarlos (y eso que son los que más páginas dedicadas reciben) no resultan especialmente atractivos. Una sección más, llamémosles los batmaniacos, (patrocinados por Nightwing) se atisban protagonistas del siguiente número, dispuestos a descubrir la identidad de Red X.
Los nuevos integrantes pueden llamar la atención, pero tan solo uno se demuestra estimulante, también es verdad que se ha indagado muy poco en ellos. Summer Zahid, Matt Price, Brick Pettirosso, Alinta, Gorila Gregg, Tooby, Stitch, son los principales, aunque si en algún momento se quedan cortos de efectivos (ja) hay muchos más inscritos en la academia. Pocos son expuestos, de muchos se desconocen sus poderes y los diálogos en los que aparecen no son dotados de una voz lo suficientemente característica como para conocerlos y recordarlos. Alinta y Zahid tienen una buena relación, amigas, se apoyan mutuamente. Alinta, Bolt, es el personaje más explorado en este primer tomo, con reminiscencias a Johnny Quick la nueva velocista resulta interesante y atractiva, de lo mejor que se puede sacar del cómic. Matt también goza de cierto protagonismo, el chico es reflexivo, inteligente y poderoso, a los maestros les recuerda a Conner. La encarnación de Glass de los Teen Titans también está en la escuela, haciendo las veces del joven equipo, con ciertos privilegios sobre los recién llegados. Aparecen poco, se presumen más llamativos (quizás por el cariño ganado) y se les echa de menos, además se produce una baja entre sus filas.
El tercer capítulo incluido en el tomo prosigue donde lo dejó Escuadrón Suicida #1 de publicación simultánea en nuestro país. Un cruce con más importancia (sin ser capital en absoluto) para la serie de la Fuerza Especial X que para esta de los Titanes. Sheridan desaprovecha la oportunidad de escribir a un antiguo Titan volviendo a su casa. Superboy no tiene una línea de diálogo en todo el capítulo, resulta elegante la mirada triste del joven clon a una foto, pero escasa ante las posibilidades que se le presentan. Una percepción extensible a todo el guion, una buena premisa mal explotada, con algún acierto, pero insuficiente en prácticamente todos los aspectos.
Sandoval representa bien el variado elencos de héroes, también las escenas de acción o las más numerosas viñetas centradas en los diálogos, con su siempre elegante trazo de línea fina. Tarragona, su inseparable entintador, se luce con sus sombras otorgando vigor y definición a los personajes. El color de Alejandro Sánchez es apropiado, de tonos apocados en la mayoría de páginas que no resaltan excesivamente, dando prioridad y focalizando el trabajo realizado por sus compañeros. Un arte que eleva la nota general del cómic. Jordi Tarragona tuvo la amabilidad de concedernos esta entrevista incluida en el Magazine DC.
La serie quiere abarcar mucho, debe dar espacio a los profesores, debe presentar a los nuevos personajes (además de hacerlos interesantes) y aún reserva un par de páginas para la anterior alineación del grupo. En ningún concepto está inspirada, los Titanes originales, los alumnos o los Teen Titans, definiéndolos torpemente y relatando de forma insulsa sus relaciones en casi todos los casos. El misterio que presenta la trama, centrado en Red X (personaje nacido en la televisiva Teen Titans Go¡) del que se desconoce la identidad (todo apunta a que es un nuevo alumno el que se encuentra bajo la máscara) tampoco engancha lo suficiente, al ensalzar las cualidades del personaje de forma artificial. Un cómic con buena premisa, fallido en su ejecución, cuyo gran valor se encuentra en el dibujo.
Lo mejor
• El dibujo.
Lo peor
• Prácticamente ningún personaje del libro, salvo Bolt, resulta interesante.
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