Javier Vázquez Delgado recomienda: Disque Bleu, de Felipe Hernández Cava y Miguel Navia
Edición nacional/España: Disque Bleu. Norma Editorial. Diciembre, 2021
Guion: Felipe Hernández Cava
Dibujo: Miguel Navia
Color: Miguel Navia
Formato: Cartoné, 56 páginas. 18€
Disque Bleu es algo más que la marca de cigarrillos que fumaba Albert Camus
«Es hora de que el pueblo ruso, en representación del resto de la especie humana, enjuicie a Dios.»
Leer Disque Bleu de Felipe Hernández Cava al guion y Miguel Navia al arte, es adentrarse en la miseria espiritual y política del siglo XX que, desgraciadamente, sigue muy presente en el momento actual.
Los autores nos muestran, mediante pequeñas catas realizadas en diferentes episodios históricos, que el fanatismo, el racismo, la intolerancia y la violencia sobre el más débil no tiene colores, no se circunscribe a determinadas épocas, no responde a causas justificadas ni tampoco conoce fronteras.
En Disque Bleu podemos asistir a varios momentos de la visita que el filósofo británico Bertrand Russell, invitado por el gobierno de Lenin, realizó a Moscú en 1920 y cómo este tour propagandístico le desveló la verdadera faz del régimen soviético. También podemos acompañar a un hombre ciego y a un niño vagabundo por las calles de Madrid en 1936, mientras los aviones fascistas están bombardeando la ciudad, mientras el mundo que conocen está desapareciendo… En otro relato, situado en 1943, acompañamos a un joven latino por las desiertas calles de Los Angeles, pobladas por una densa niebla nocturna, en un paseo fantasmagórico pero henchido de rebeldía, contra la violencia racial y la intolerancia. El siguiente cuento está localizado en Nueva York donde asistimos a la desaforada persecución contra los músicos negros de jazz, llevada a cabo por un oficial del departamento de narcóticos que va enloqueciendo paulatinamente y, finalmente, la primera historia del álbum, la que da título a la obra, nos sitúa en otra vez en Moscú, donde un agente del espionaje soviético le explica a un colega su último y escabroso viaje a Francia, realizado unos meses antes, y su inquietante implicación en la muerte del filósofo y escritor Albert Camus.
Este álbum contiene los siguientes relatos:
Disque Bleu (2020-2021)
Madrid resuena (2019)
Tovarich filósofo (2021)
Chucho suave (2020)
Lover man (2017)
En estos cinco cuentos breves Felipe Hernández Cava prosigue con su revisión histórica de los principales acontecimientos del siglo pasado pasándolos por el matiz del humanismo y del escepticismo. El racismo institucional y social de los EEUU o el régimen totalitarista, deshumanizador y paranoico de la URSS se asemejan en su forma de tratar a los que son diferentes, a los débiles, a los que no comulgan ciegamente con la corriente principal. Los cinco relatos están centrados en las víctimas, directamente como en el caso de los pachucos y en la singular pareja madrileña, o en el brazo armado de los verdugos como en los dos cuentos sobre Albert Camus y sobre el jazz. El sueño de la razón produce monstruos y la exacerbación de las ideologías también, acaba convirtiendo a la política en el substituto de la religión.
Resulta curioso y algo desconcertante que los autores no hayan incluido ningún protagonista femenino entre sus historias, cuando la discriminación de género ha sido una principales batallas sociales del siglo pasado y lo sigue siendo en la actualidad.
En el capítulo gráfico-narrativo, Miguel Navia realiza un trabajo eficaz, elegante, excelentemente documentado pero algo rígido y acartonado.
Su distribución de la página pasa por usar una cuadrícula de tres tiras con dos o tres viñetas cada una, salvo en el caso del cuento titulado Lover man donde se basa en un esquema de dos tiras con dos cuadros cada una.
Su definición de los personajes es correcta, tienen personalidad, se mueven con algo de envaramiento y sus expresiones faciales son limitadas pero expresivas. La ambientación es extraordinaria, la descripción de calles, edificios, mobiliario, vehículos y paisajes nos sumerge en cada época y consigue que sintamos el frio, la humedad, la niebla o incluso el temor a lo desconocido, sea una bomba lanzada desde el aire o un garrotazo racista propinado en la oscuridad.
El uso del color es otro de los puntos fuertes del arte de Navia. Su paleta se adapta a las épocas descritas y se basa en verdes desvaídos, azules pálidos, ocres, marrones claros, añadiéndole toques puntuales de rojo y naranja más vivos que le sirven de contraste.
Felipe Hernández Cava nació en 1953, en la época más oscura de la postguerra. Su infancia no fue especialmente infeliz, sin embargo su obra está marcada por esta situación histórica. Sus primeros trabajos bajo el pseudónimo de El Cubri, junto a los dibujantes Pedro Arjona y Saturio Alonso, tienen un claro formato reivindicativo y obrero. Como miembro de este colectivo también escribió dos magníficas series de género negro; Sombras y Peter Parovic. Así mismo, es autor de los guiones de la tira de prensa El hombre invisible entre 1985 y 1988 para el diario El País.
Como Hernández Cava firma varias obras combativas y comprometidas junto a dibujantes como Marika, Adolfo Usero y Luís García. Durante algo más de tres años fue el director artístico de la revista Madriz y más tarde de Medios Revueltos. En 1989 empezó la trilogía sobre Lope de Aguirre con los álbumes: La aventura, La conjura y La expiación dibujados por Enrique Breccia, Federico del Barrio y Ricard Castells, respectivamente. En 1993 realiza junto a Federico del Barrio la serie Las memorias de Amorós y tres años más tarde los dos mismos autores crean El artefacto perverso, que ganará el premio del Saló del Comic de Barcelona de 1997. Otras obras destacadas son Berlín dibujada por Raúl, Bebop y V-Girl en colaboración con Enrique Flores y Pep Brocal, respectivamente.
En 2009, Cava recibe el Premio Nacional del Cómic por Las serpientes ciegas junto a Bartolomé Seguí y supone el inicio de otra tetralogía con Hágase el caos: Lux (2011), Hágase el caos: Umbra (2012) y Las oscuras manos del olvido (2014), una serie, política y polémica, que le vuelve a situar en este territorio incierto de autor extraordinariamente respetado, pero casi desconocido.
En 2020, Norma Editorial edita el álbum Estampas 1936, donde junto al dibujante Miguel Navia retrata la Guerra Civil española desde diferentes puntos de vista. El año siguiente los dos autores firman Disque Bleu, también publicado por la editorial barcelonesa.
Miguel Navia nació en Madrid en 1980. Estudió en la Escuela de Artes y Oficios de la capital española. Sus primeros pasos profesionales se encaminaron hacia la confección de storyboards para publicidad, colaborando con productoras como como Bassat, Remo, Walter Thompson o Impala y como ilustrador en obras del escritor Carlo Frabetti y para editoriales como Grupo Planeta, Grupo Z, Ediciones La Librería y Ediciones SM. Para esta última editorial y con guiones de Frabetti publica dos historietas tituladas El parque de la luna (2008) y Nevermore (2009), esta segunda obra basada en el famoso poema titulado El cuervo, de Edgar Allan Poe.
En 2011 escribe e ilustra el libro Gran Via Madrid que publica la editorial Treseditores y en 2014 publica Chueca con Reino de Cordelia. Ambos son impresiones escritas y recreaciones dibujadas del ambiente de determinadas zonas de su ciudad natal. El artista madrileño colabora regularmente con la revista Fiat Lux, especializada en el género negro y para el semanario Babelia del periódico El País. Es además un excelente portadista de libros y publicaciones periódicas.
Mientras ejerce su principal actividad en la ilustración comercial, Navia también participa en la revista M21 Magazine aportando su arte a numerosos relatos cortos, algunos de los cuales escritos por Hernández Cava. En 2020 realiza junto a este mismo guionista el álbum Estampas 1936 y un año más tarde los dos autores madrileños presentan Disque bleu. Norma Editorial es la encargada de publicar estas dos últimas obras.
La confección física y el diseño del álbum a cargo de Norma Editorial es excelente. El tomo tiene un tamaño muy adecuado, es en cartoné, está excelentemente impreso y cuenta con un buen papel. A parte de los cinco relatos, incluye un extenso texto de Felipe Hernández Cava a modo de epílogo que nos concreta las claves de cada historia. El precio es algo elevado pero no excesivo.
Disque Bleu es una obra intensa, escéptica y melancólica que nos muestra la fragilidad del ser humano frente a las grandes manifestaciones históricas y frente a las ideologías destructoras, pero también es una oda al pensamiento individual, a la valentía de la gente que, pretendidamente o casi sin quererlo, resiste a estas olas de intolerancia y se atreve a pensar y actuar por su cuenta, asumiendo un riesgo que les puede costar muy caro. Desgraciadamente, unos asuntos que siguen siendo muy actuales.
Salut!
Lo mejor
• El tono crítico y valiente de los relatos.
• La excelente recreación histórica de Miguel Navia.
• Una edición de lujo.
Lo peor
• La ausencia de personajes protagonistas femeninos.
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