Javier Vázquez Delgado recomienda: Jolgorio, de Brecht Evens
Edición original: Het amusement BEL (Oogachtend, 2018)
Edición nacional/España: Jolgorio (Astiberri, 2022)
Guion: Brecht Evens
Dibujo: Brecht Evens
Traducción: Maria Rossich
Realización técnica: Juanjo El Rápido y Alba Diethelm
Formato: Cartoné. 336 páginas. 30€
Orgia de color.
«Sal a dar un paseo. Despídete de esta ciudad apestosa.»
Acercase a la lectura de un cómic de Bretch Evens (Hasselt, Bélgica, 1986) nunca resulta una tarea sencilla de acometer, pero siempre se convierte en una experiencia de lo más estimulante, no solo por el impacto de sus coloridas páginas repletas de composiciones atrevidas, sino también porque sus historias tienen la costumbre de no ser nunca lo que parecen en un primer momento lo que provoca que se te acaben quedando en la retina y en las entrañas mucho tiempo después de finalizar su lectura. Algo que ya sucedía con sus trabajos anteriores, la ganadora del Premio de la Audacia en el Festival Internacional del Cómic de Angoulême de 2011 Un lugar equivocado (Sins entido), Los entusiastas (Sins entido) y Pantera (Astiberri), y también sucede con Jolgorio, su último trabajo recientemente publicado en nuestro por Astiberri y que fue premiada con el Fauve Premio Especial del Jurado en el festival de Angoulême de 2019.
Jolgorio nos cuenta las historias entrecruzadas de tres personajes muy particulares que coinciden en un restaurante de moda en una noche de fiesta. Jona, un joven que se va de Bélgica al día siguiente para vivir con su esposa en Berlín, así que decide correrse una juerga como despedida de su ciudad, Victoria una joven con problemas psicológicos que quiere vivir su propia vida lejos de su controlador entorno familiar y Rufo un antiguo rey de la noche que está pasando un mal momento, pero al que el irresistible influjo de la noche le hará recuperar su antigua personalidad. Aunque en sus correrías acaban por compartir lugares de fiesta nocturna, los tres por separado emprenden un viaje alocado lleno de desenfreno, excesos y alegría, que al llegar el nuevo día se acaban transformando en una resaca son sabor amargo y un punto de tragedia.
Jolgorio es un festín para los sentidos con un Bretch Evens que firma en lo gráfico el mejor trabajo de su carrera. Sus páginas son un delirio de color apabullante gracias a unas acuarelas llenas de fuerza en las que caben todos los colores posibles y repletas de detalles que hacen que te quedes un buen rato contemplándolas absorto arriesgándote a quedar atrapado por el síndrome de Stendhal. Por suerte, el autor belga no se olvida que se trata de una obra concebida para contar una historia y narrativamente es otro prodigio con un despliegue de recursos que deja ver que estamos ante un artista que conoce a la perfección cómo se lee un cómic y las posibilidades que otorga el medio expandiendo sus límites para crear una obra esplendida que nos transite en todo momento el frenético movimiento de las noches de fiesta. A lo largo de las más de trescientas páginas que dura la obra vemos recursos espectaculares como una página con cerca de ochenta viñetas o dobles slash-pages en las que los protagonistas se desplazan como si fuera una ciudad caminando por sus calles atestadas mientras mantienen una conversación, unas secuencias que se combinan con otras mucho más íntimas en la que únicamente vemos a una pareja charlando. Para evitar que el lector pueda perder de vista a sus personajes el autor belga ha optado porque el rotulado de sus diálogos tengo un color distintivo para cada uno de ellos, de manera que siempre sepamos quien está hablando.
Toda esa prodigiosa exhibición técnica de color y composición consigue que Evens nos nuestre una ciudad rabiosamente viva, llena de neones, pubs, discotecas y personas con ganas de pasarlo bien. Una buena muestra de lo que se puede encontrar en las zonas de marcha de cualquier ciudad, aunque con unos personajes excesivos y pasados de rosca, pero que no están tan alejados de la fauna que podemos ver en la vida real. Los tres personajes principales están muy bien construidos y sus historias pese a ser realmente delirantes y psicodélicas por momentos nos dejan un sabor a cenizas que nos recuerda que estamos leyendo una obra del autor de Pantera, uno de los cómics más duros que hemos podido leer en los últimos años. Pero como ya hemos dicho la experiencia merece mucho la pena ya que estamos ante una obra llena de tantas capas de lectura como caras tienen sus protagonistas.
Como ya es una tónica habitual la edición de Astiberri es de una calidad enorme, pero en este caso hay que resaltar y celebrar el hercúleo trabajo de maquetación y rotulación de Juanjo el Rápido y Alba Diethelm que replican el estilo de Evens en la obra original de manera que queda perfecto. Un trabajo de diez.
Con esta absorbente novela gráfica Bretch Evens ha firmado una obra multicolor que celebra la diversión, locura y las ganas de vivir de las noches de fiesta, pero que nos recuerda que cuando se apagan las luces comienzan las mañanas de resacas terribles en las que tenemos que lidiar con todo lo que hicimos en pleno jolgorio. Sin duda, estamos ante una de las grandes obras de lo que va de año 2022.
Lo mejor
• El maravilloso color de la obra.
• El retrato de la noche de la cuidad y de sus habitantes.
• El trabajo de rotulación y maquetación de Juanjo el Rápido y Alba Diethelm.
Lo peor
• Nada.
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