Javier Vázquez Delgado recomienda: Superman Exilio 1 de 2

Superman

Edición original: Adventures of Superman núms. 445-456, Superman núms. 24-33, Action Comics Annual núms. 2 USA (1988-1989)
Edición nacional/España: Superman Exilio 1 de 2. ECC Ediciones, 2022
Guion: Dan Jurgens, Jerry Ordway, Roger Stern, Tom Peyer
Dibujo: Bob McLeod, Curt Swan, Dan Jurgens, Jerry Ordway, Kerry Gammill, Paris Cullins
Entintado: Dennis Janke, John Beatty, Brett Breeding
Color: Peter Scotese, Glenn Whitmore
Traducción: Jaime Valero Martínez
Formato: DC Omnibus (Cartoné, 156×239 mm.), 560 págs. A color. 45,50€

Superman: más allá del cielo

Byrne había dejado las colecciones del personaje con un sinfín de líneas argumentales abiertas y situaciones complicadas, de muy difícil continuación. La principal, fruto de la más cuestionable decisión de Superman, abriría el camino para la gran historia narrada en este tomo. Se trasladan elementos éticos a sus acciones y se disponen de los fundamentos para la reconstrucción progresiva de los valores de Clark, a través de las experiencias que va a vivir a lo largo de este exilio.

Lejos de apartarse deliberadamente del pasado inmediato narrado por Byrne, Jerry Ordway y Roger Stern son muy inteligentes en su planteamiento. No renuncian a los hechos ni dan un giro mágico, tan común en el tebeo de superhéroes, para justificar sus actos plenamente o hacer como si no hubiesen existido, sino que dan una lección como guionistas a la hora de desarrollar su aventura.
Superman
Los primeros números sirven de síntesis de lo anterior, de acuerdo con el programa trazado por el mencionado autor de El Hombre de Acero, incidiendo en el trauma del protagonista y la carga física y mental que sufre. Se le ve más descuidado, menos dado a resolver con pericia los problemas que se le plantean y claramente exhausto.

El dibujo de Ordway trata muy bien estos temas, cargando los rasgos faciales de Superman, menos inspirador en combate, a pesar de mantenerse los aspectos más físicos de su potencial infinito como guardián de los inocentes. Vemos una clara evolución en su arte, mucho más dinámico que en años precedentes y resolutivo sobre todo en las escenas de oficina en el Daily Planet, espacio en el que se desarrollan realmente las pequeñas historias que conforman la vida del personaje.

Realmente sientes ese dolor, ese vacío, a través del dibujo. La narrativa es sobresaliente en este sentido, pero también a la hora de trazar las restantes, que se relacionan con la principal, como son los problemas de Lois o la dificultad de Jimmy Olsen para superar su aire juvenil y ser tomado como un adulto.

El entintado de Dennis Janke resulta adecuado para a historia tratada, con capacidad de detalle a la hora de retratar la pobreza de la ciudad de Metrópolis y dándole a Adventures of Superman un ambiente más sucio y desagradable, cuando no directamente, como en el número 445, sumiendo al personaje en la oscuridad absoluta.

En cuanto a la colección principal, esta línea marcada está presente también desde el número 24, con el que arranca la recopilación, desde la primera escena en el hospital. Todo es enfermizo, retorcido y menos luminoso que antaño. El dibujo de Kerry Gammill, con tinta de John Beatty, es ligeramente más heroico en su concepción del personaje, con menos capacidad en lo que respecta la anatomía y los rostros, pero de igual manera muy coherente con el argumento tratado.

La locura se vuelve insoportable a partir del número 25, en el que se juega con la mente de Clark y que lleva tanto a lector como personaje a cuestionarse qué es real y no. La aparición de un nuevo superhéroe en las colecciones lleva a incidir en estas ideas que, con el paso de los meses, constituyen la decisión última de abandonar la Tierra.

Con los cruces con el evento Invasión presentes, todo se prepara para la partida en el número 450 de Adventures of Superman, uno de los mejores de la historia del héroe del Krypton. Jerry Ordway y Dennis Janke llevan un paso más allá las consideraciones anteriormente comentadas de guion y dibujo, con momentos cargados de drama. Para ello, recuperan a Lana en el último día de Clark en nuestro planeta, así como a los Kent, que en compañía de Matrix (personaje que tendría un papel notable en un futuro no muy lejano) le despiden entre lágrimas.

La splash-page ha pasado a la posterioridad como la representación absoluta de todo lo que es Superman para el Universo DC. Un héroe imposible, perfecto en apariencia, que vuela y resulta invencible, pero que a la vez es familiar y la persona más humana del mundo. Por eso es tan importante contar con estos secundarios, que son los que dan el espíritu nostálgico a la escena. De tiempos que no volverán y amores imposible de tebeo.

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Roger Stern arranca con el guion del exilio, entendido como un viaje de autodescubrimiento. A través de los distintos encuentros se va preparando el definitivo: el juicio personal de Clark y la fundamentación de su renuncia a matar. Si bien el dibujo tanto de Superman como de Adventures of Superman, resulta parco en detalles, habida cuenta de las posibilidades infinitas del especio exterior, sí cautivan con su enfoque intimista, en contraposición al escenario en el que transcurre la historia.

Se produce un cambio en el dibujo, con Dan Jurgens tomando los lápices para buena parte del arco, que transcurre a dos tiempos. En Metropolis, lo principal nace de Lex Luthor, el enemigo por antonomasia. Se va relajando la imagen proyectada por John Byrne, haciéndole ser más corpulento físicamente, sin recurrir tanto a su traje y corbata habitual, pudiendo verle en otras situaciones más cotidianas y menos elevadas. Su inteligencia se ve reflejada en su modo de actuar, mediante los aparatos legales a disposición y dejando una representación muy certera del villano.

Al otro lado del mundo, todo va tomando forma, con la captura de Superman. El Action Comics Anual 2, con un trabajo compartido por Jerry Ordway, George Pérez, Roger Stern, Mike Mignola, Curt Swan y Brett Breeding, es la pieza magistral que culmina con lo anterior. Un poderoso número en el que se realiza un estudio de personaje colosal, único, y que ataca directamente a las raíces de la nueva etapa y la anterior.

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Un broche dorado, que se resuelve completamente en los números siguientes, para preparar la vuelta de Superman y que cierran con maestría una conjunto único, esencial para conocer al personaje.

Respecto de la edición de ECC, contamos con un primer tomo de la línea Superman Legends, con las mismas características de la propia de John Byrne. En comparación con el Omnibus americano, hubiera estado bien haber contado con la introducción de Jerry Ordway, que cuenta gran parte de los entresijos de la etapa y que permiten un mayor conocimiento global de la misma.

Lo mejor

• El potencial dramático de la historia, su sentido de la épica y cómo define a Superman a partir de los pedazos dejados por John Byrne.
• El dibujo, que alcanza cotas espectaculares.

Lo peor

• Requiere la lectura previa de Byrne para que sea un conjunto completo.



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