Javier Vázquez Delgado recomienda: Reseña DC USA -Justice League: Road to Dark Crisis #1

Edición original: Justice League: Road to Dark Crisis #1 (DC Comics, 2022)
Guion: Joshua Williamson, Chuck Brown, Phillip Kennedy Johnson, Stephanie Phillips, Jeremy Adams
Dibujo: Clayton Henry, Dan Jurgens, Leila Del Duca, Fico Ossio, Rosi Kämpe
Entintado: Norm Rapmund
Color: Marcelo Maiolo, Jordie Bellaire, Hi-Fi, Matt Herms, Sebastian Cheng
Formato: Grapa- 48 páginas. 5,99$

Dark Crisis… ¡¡allá vamos!!

«The multiverse is in danger… and this time only you can save it»

El evento, que según DC lleva 30 años cociéndose, va cogiendo forma. Dark Crisis será lo más grande de los últimos tiempos, pero seguramente menor que el próximo macroevento. Así es la bola sin fin de los pelotazos editoriales.

Por ahora, seguir Dark Crisis parece fácil pero es muy probable que se acabe complicando en un indigesto diagrama de flujo, como si fuera un algoritmo para placer y disfrute de los aficionados más geeks.

DC está alineando las colecciones principales para enfilar el gran evento. Hace meses, muchos meses que está preparando el contenido de lo que está por venir y la organización editorial con autores de renombre en títulos aparentemente secundarios pero que tomarán protagonismo en los próximos meses (¿años?)

Es difícil situar el inicio de Dark Crisis, más allá de la reunión editorial en la que se tomó la decisión. Desde un punto de vista de los hechos que han estado ocurriendo, las miguitas hace tiempo que se dejaron caer. ¿Cuándo empezó DC a mover a sus personajes y tramas camino de Dark Crisis? ¿Cuándo Jon pasó a ser un adolescente? ¿Cuándo murió Alfred? ¿Cuándo Diana se fue a luchar al espacio?

Está claro que los pasos adelante que han dado muchos de los personajes junior de la editorial iban encaminados al evento y al post-evento.

Pero más allá de especulaciones, el punto de salida es la muerte de la Liga de La Justicia en el número 75. Una vez se marchó Bendis, Williamson tomó las riendas y puso en marcha la maquinita.

Tal y como comentó Pablo en su sección, la muerte la liga se produjo en un chispazo con una falta de épica sospechosa. Nada peor para tirar por el suelo las expectativas del lector veterano que sospecha que todo esto es cuento y que la liga va a volver antes de 2023.

Hay dos tipos de lector veterano. El que está harto de esas muertes falsas con fecha de caducidad y el que está harto de estar harto y ya solo busca pasar un buen rato leyendo los tebeos y no dejar que le amarguen con errores de continuidad y reboots chapuceros.

Sin embargo, el pim pam pum de la muerte de la liga del 75 (se resuelve en dos páginas) es capaz de cabrear al lector harto de estar harto

¿Para esto llevamos meses anunciando la muerte de los principales personajes de DC?

Llegados a este punto, DC publica este número como previa a Dark Crisis para que veamos donde están los personajes que, según parece, van a liderar la nueva liga de la justicia.

Se trata de un número coral en lo artístico y en lo “protagonístico”. Vemos como se sitúan los que van a heredar los roles de los personajes clásicos. Nightwing, Superman, Aquaman, etc.

Por ser un número que inicia el duelo ( a Superman se le ha muerto el padre) están todos de una pachorra y de un tranquilo que demuestra una falta de emotividad pasmosa.

Recordemos, que para bien o para mal, cuando muere un personajes tenemos decenas de páginas de pena, luto e introspección. Aquí muere toda la liga y la reacción general es más propia de una baja laboral.

Las historias que tenemos son las siguientes:

Team-up. (Joshua Williamson y Dan Jurgens). Vemos como Nightwing y Superman (Jon) trabajan en equipo para detener a Brick. La pelea es un mero pretexto para que ambos personajes hablen sobre la desaparición de sus mentores. Jon trivializa la muerte del primer Superman con lo de “ya murió, seguro que vuelve” como si fuera un fan escéptico cualquiera. La historia acaba con una clase de alianza de cara a mantener vivo el espíritu de la Liga. El relato tiene una falta de emotividad preocupante. Parece que la haya escrito una persona con problemas emocionales. Se podrían hacer tantas cosas con ambos personajes ante la tragedia de Superman y Batman, se podría jugar con como reacciona un Superman postadolescente que ha crecido demasiado rápido, cómo gestiona sus emociones, pero no… la historia es un trámite, un peaje… para explicarnos como dar paso a la alianza entre las dos franquicias principales de DC. Las comparaciones con lo que está haciendo Tom Taylor en las colecciones de ambos personajes es sonrojosa.

Life of purpose (Jeremy Adams y Rosi Kämpe). Es el turno de Flash en una historia con un dibujo “demasiado” moderno y digital. Quizás es la manera que el editor tiene para demostrarnos el electrizante poder de los velocistas. Sale mal. La historia parece que no aporta nada a Dark Crisis. Simplemente es la manera en la que Wally West explica a Ace como superar una muerte grave como la de Barry. Parece que el único motivo es explicarnos en que punto se encuentra Flash. A otra cosa.

Survivors (Chuck Brown y Fico Ossio). Green Lantern (Hal) y Jackson Hyde se alían para enfrentarse a una amenaza interplanetaria. Hal es el único “grande” que parece haber sobrevivido a la matanza de la liga (ojo ahí, ¿tendrá algo que ver?) Hyde le comunica la muerte de sus compañeros. El dibujo de Fico Ossio sube el nivel de lo visto hasta el momento.

The Pariah (Phillip Kennedy Johnson y Leila Del Duca). En este relato vemos como Paria cae en las redes de la Gran Oscuridad. Aquí entendemos porque el personaje da un giro hacía el “lado oscuro”. Great Darkness le pone un cebo que no puede rechazar. Puede que sea la historia más importante, relevante y aclaridora del cómic. Buen trabajo de los autores. Eficaz, correcto, sin andarse por las ramas.

Because the night (Stephanie Phillips y Clayton Henry). Batgirl detiene a Nocturna cuando esta intenta robar en un museo. Parece una historia de relleno salvo por dos cosas. Ver la alianza de villanos final ahora que han desaparecido los principales héroes de DC y el dibujo de Clayton Henry que demuestra que se pueden hacer cosas con estilo y atractivas con soporte digital. Algo bastante poco habitual.

Inevitablemente se trata de un número irregular con altibajos. Alternan lo relevante con lo emotivo, lo insulso con lo importante. El baile de dibujantes no es tan molesto ya que se tratan de historias independientes.

Sorprende y asusta la falta de nivel y relevancia de algunas historias viendo la (presunta) importancia del macro evento. Parece un anual de los noventa, simplemente para cumplir el expediente y hacer caja.

La historia de Paria aporta algo a Dark Crisis pero el resto se podía resolver con un par de viñetas en cualquier colección random. Es como si hubieran juntado un remedo de detalles por conectar y los hubieran cosido de manera más o menos torpe antes de empezar la tralla de verdad.

Destaca el dibujo de Clayton Henry, sobretodo y luego el de Fico Cossio y Leila Del Luca. Jurgens cumple y Kämpe ya es algo para muy cafeteros.

Las historias fluyen con facilidad. Los guionistas hacen un trabajo de oficio, tratando los temas necesarios pero no se mojan y desde luego, no van a recibir una nominación a los Eisner por este cómic. La falta de profundidad psicológica y emocional es sorprendente. Se podría hacer un análisis de los que proyectan los autores con esta especie estilo autista.

Lo mejor

• Clayton Henry.
• La historia de Paria.

Lo peor

• Muchas cosas, pero lo de verdad da terror es ver el nivel de desinterés con el que DC se toma Dark Crisis.

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