Javier Vázquez Delgado recomienda: Ha fallecido Alan Grant a los 73 años de edad.
Hoy se nos ha ido otro de los grandes en este año fatídico para el medio, el escocés Alan Grant (9 de febrero 1949 – 21 de julio 2022). Guionista reputado en Inglaterra, especialmente por su trabajo en Judge Dredd , y en los EEUU, donde destacó como uno de los grandes autores de Batman.
Algo rebelde en los estudios, Grant fue introducido en los 70 el mundo de la escritura gracias a su inseparable compañero John Wagner y una revista clave para el medio, 2000 AD. Allí, aparte del popular policía de Mega-City, también desarrollaría Robo-Hunter (con Ian Gibson) y Strontium Dog (con Carlos Ezquerra), además de contribuir a las famosas historias de Future Shock.
En los 80 salta el charco y aterriza en un DC ansiosa de nuevo talento británico. Con Wagner guioniza Batman desde el mítico Detective Comics 583 formando equipo con el talentazo de Norm Breyfogle. Juntos entregarían una etapa para el recuerdo dejándonos personajes como el Ventrílocuo y el Ratonero. Su colega abandona, pero el continúa creando enemigos para la galería tan carismáticos como Zsasz y el Anarquía. Dos villanos a los que sacaría mucho partido durante su estancia en la serie.
Antes de separarse, sin embargo, realizarían The Last American para Epic Comics (junto con el dibujante Mike McMahon), uno de sus pocos y muy tangenciales contactos con Marvel, la delirante Bogie Man para el sub-sello de DC, Paradox (con Robin Smith), y se repartirían sus series inglesas salomónicamente. Y aún tendrían ganas de algún trabajo conjunto precisamente para los emparejamientos de Batman con Dredd.
Nueva década de éxitos en los 90 con una nueva pareja que nos daría para muchas carcajadas, Grant y Keith Giffen. El dúo se dedicaría a llevar a la gloria a la creación del propio Giffen, Lobo, y juntos desarrollarían el otro hijo descarriado de éste, la irreverente L.E.G.I.O.N. La primera miniserie de Lobo con Simon Bisley nos dejaría marcados a toda una generación, y de hecho daría para otras genialidades y otras gamberradas ya con Grant en solitario, que incluso se encargaría de la serie regular. E igualmente, la pre-cuela(?) de la Legión que actualizaba título con cada año, terminaría siendo serie propia del británico. Al igual que su serie de Demon, también de la época.
Pero en los 90 no se olvidaría de Batman, para el que crearía nueva serie, Shadow of the Bat, y formaría parte, como una sólida referencia, de los distintos equipos que se encargaron de las mega-sagas del murciélago. Empezando por la original, Knightfall, y continuando con Contagio, Legado y Cataclismo. Además de darle serie propia a su creación favorita para el universo del caballero oscuro, Anarquía, junto con Breyfogle.
Con la entrada del nuevo siglo, Grant se diversifica escribiendo guiones para animación y novelas de personajes de comic. Lo más interesante es que se concentra en el mercado independiente, especialmente de vuelta a su tierra natal, como editor. Vuelve con Wagner para crear la editorial Bad Press Ltd, del que saldrían gamberradas como Shit the Dog (Grant y Bisley) o la más interesante revista antológica Wasted. Guionizando la mayoría de las historias, daría una primera oportunidad a jóvenes talentos entre los que destaca Frank Quitely. Y aún tendría fuerzas para crear otra editora en solitario, Berserker Comics, en la Bisley se encarga del apartado artístico.
Grant siguió levantando proyectos e iniciativas hasta el final, reforzando su inmensa creatividad y energía. Una lástima perder esta rara avis capaz de ser anarquista, independiente e insolente en el seno de grandes editoriales. Sus personajes cínicos, crueles y pasados de rosca nos ayudarán a seguir sonriendo, pese a todo. Descanse en paz.
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