Javier Vázquez Delgado recomienda: Blue y Gold
Edición original: Blue & Gold núms. 1-8 USA (DC Comics, 2021)
Edición nacional/España: Blue y Gold (ECC Cómics, 2022)
Guion: Dan Jurgens.
Dibujo: Ryan Sook, Cully Hamner, Dan Jurgens, Kevin Maguire, Paul Pelletier, Phil Hester.
Entintado: Ryan Sook, Eric Gapstur, Norm Rapmund, Wade Von Grawbadger.
Color: Ryan Sook, Chris Sotomayor.
Traducción:
Formato: Rústica, 104 págs. A color. 21,00 €
Bwa-hahaha-hahahahaha
La historia de estos dos personajes es muy distinta.
Blue Beetle es el nombre de tres personajes a lo largo de la historia. El primero, creado en la editorial Fox Comics (que luego acabaría siendo propiedad de Charlton Comics), por Charles Nicholas Wojtkoski, en 1939, para la serie Mistery Men Comics #01, respondía al nombre Dan Garrett, cuyos poderes residan en un Escarabajo sagrado. El segundo Blue Beetle vio la luz en el seno de Charlton Comics, de la mano de Steve Ditko, en 1966, en la serie Captain Atom #83, bajo el nombre de Ted Kord, inventor y atleta, ex estudiante de Dan Garrett, sin más poderes que su ingenio y su nave insecto volador. En 1983, el fondo editorial de Charlton (Capitán Atom, Pacificador, Nightshadow, Question…) acabó en manos de DC Comics y tras el fallido intento de introducirlos en el Universo DC por parte de Alan Moore, se optó por la integración a raíz de la publicación de Crisis en Tierras Infinitas. Y el tercer Blue Beetle, es Jaime Reyes, que tiene poderes derivados del Escarabajo sagrado original de Garrett, recuperado por Kord (en Crisis Infinita) y almacenado en la Roca de la Eternidad que, al ser destruida, lo dejó caer en Texas, dotando de habilidades especiales al bueno de Jaime.
Pero a nosotros nos interesa Ted Kord, su nave Bicho, sus artefactos de luz y aire comprimido, así como decir que tuvo serie regular en solitario, con un total de 24 entregas, escrita por Len Wein, con dibujo de Ross Andru, en 1988. También es interesante saber que Ted murió a manos de Maxwell Lord y que volvería a la vida en la saga El Día Más Brillante y que su vida cambiaría para siempre cuando se lanzó al mercado la serie regular de la nueva Liga de la Justicia (1987), escrita por Keith Giffen y J. M. DeMatteis, en la que conoció a Booster Gold. Kord es un tipo alegre, ingenioso, locuaz, que disfruta de su vida como héroe y ve el mundo desde la sana perspectiva de un niño, al tiempo que arrastra tras de sí cierto halo trágico.
La vida editorial de Booster Gold es mucho más reciente y solo hay un héroe que responda a ese nombre. Dan Jurgens lo creó en 1986 y debutó en su propia serie regular Booster Gold #01. Esto le otorgo el privilegio de ser el primer personaje relevante introducido tras Crisis en Tierras Infinitas. Su serie regular duró un total de 25 entregas y formó parte de la Liga de la Justica Internacional desde 1987 hasta la disolución del grupo en el año 1996. Liga en la que su vida se cruzó con el que estaba destinado a convertirse en su mejor amigo, Ted Kord.
Booster Gold, de nombre Michael Jon Carter, viene del futuro, con tecnología robada, un traje que le permite disparar rayos de energía, un anillo de vuelo de la Legión de Superhéroes y un cinturón que le confiere un campo de fuerza (de Brainiac 5) que lo protege de cualquier impacto. Y viene del futuro huyendo de problemas de apuestas al amañar los partidos del equipo en el que juega como profesional. Un tipo de moral dispersa, que esconde en su interior un héroe al que tardará mucho en encontrar. Carter tuvo nueva serie regular en 2006, de la mano de Geoff Johns y el propio Dan Jurgens a los lápices, para hacer suyo el eslogan: El héroe más grande del que jamás has oído hablar.
Si centramos nuestra atención en la JLI de 1987, debemos quedarnos con la inmensa labor de desarrollo y caracterización que se llevó a cabo de ambos personajes en la serie, lo que propició que se ganaran el corazón de toda una generación de lectores y se forjara una de las amistades más sólidas del Universo DC.
Con todo esto en mente, ya estamos listos para acometer la reseña de su última incursión editorial, en la que unen fuerzas de nuevo con Dan Jurgens en el guion y los dibujantes Ryan Sook, Cully Hamner, el propio Dan Jurgens, Kevin Maguire, Paul Pelletier y Phil Hester. Veamos que nos ofrecen este elenco de autores en una miniserie de ocho entregas recopilado por ECC en un solo tomo.
Tenemos entre manos una miniserie que funciona a medias y a dos tiempos. Por un lado, tenemos una historia que se siente forzada, que busca ser graciosa y no logra apenas arañar un ápice sus intenciones. El humor es algo muy complejo de tratar y a Jurgens le va muy grande. No tiene la sutileza de Giffen y DeMatteis, y el resultado final es una burda muestra de lo que en realidad se hubiera podido contar con Kord y Carter implicados. Ambos son dos personajes con una muy marcada forma de ser y se escriben casi solos, lo que hace que cueste entender que le ha pasado a Jurgens para no ser capaz de sacar lo mejor de su propia creación, Booster, y conseguir que el entramado no acabe tan aplastado por las intenciones no alcanzadas. Con esto sobre la mesa los personajes acaban estando desdibujados, se les reconoce, pero están como fuera de su estatus. Hay momentos para el drama, la comedia, pero en un todo que no se define, sin balancear la carga, por lo que descoloca al lector.
Tras una misión de rescate por parte de Blue Beetle y Booster Gold, ambos ponen en marcha una nueva forma de hacer las cosas, siendo los héroes el pueblo. Para ello promocionan su nuevo servicio en redes sociales y ponen al máximo las herramientas del nuevo marketing que Internet hace posible. Y en medio de todo esta una nueva enemiga que dice ser la legitima líder de la Tierra, lo que no hace sino complicar la cosas.
Esta es la base sobre la que Jurgens construye la historia. Una villana de nivel, introducción de los nuevos medios de comunicación que tanto le gustan Booster, guiños a los lectores, apariciones estelares de ciertos personajes para satisfacción de muchos… Un coctel que a priori debería funcionar, pero que no lo hace debido a lo ya comentado.
En lo visual los dibujantes cumplen con creces cada uno en su particular estilo. Pero también penaliza un poc que haya tantos dibujantes, en concreto en un número, en la dinámica de la historia. Sook, el dibujante que más paginas firma, destaca como siempre por su trazo limpio y sus composiciones de página, con una narrativa fluida y acorde a las necesidades del guion, con un trabajo notable de las expresiones faciales. EN cuanto a expresiones, tenemos a Maguire de nuevo dibujando a Booster y Beetle y la experiencia no puede resultar más satisfactorio. Tal vez, el más problemático sea Hester, por estar su estilo muy alejado del tono dela serie y no ser capaz de plasmar las emociones faciales tan bien como sus demás compañeros de viaje.
Los guiños comentados no compensan y tener que discurrir seis entregas para llegar a algún sitio es un peaje muy caro a pagar en una historia que, con menos ambición, en el peor de los sentidos, hubiera funcionado mucho mejor. Algo más íntimo, más centrado en su amistad y sin mirar tanto hacia arriba o querer imitar a figuras de antaño, hubiera dado un resultado más sincero y menos forzado. El primer número USA, cuando lo reseñamos, parecía sentar unas bases que resultaban interesantes, pero por desgracia el desarrollo global de este trabajo es muy deficitario para las expectativas que puede despertar entre muchos aficionados. Un trabajo que mira al pasado, se agarra al presente, pero no logra tener voz propia ya que acaba siendo un ejercicio forzado de mala comedia y drama mal gestionado. Una verdadera lástima y una oportunidad perdida.
Lo mejor
• Volver a tener juntos Beetle y Booster.
Lo peor
• Seis dibujantes en ocho números.
• La falta de concreción en sus intenciones y lo forzado que resulta todo.
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