Javier Vázquez Delgado recomienda: Basilisk 1, de YAMADA Futaro y SEGAWA Masaki

Edición original: Basilisk -Kouga Ninpou-chou- (バジリスク -甲賀忍法帖-) (Kodansha, 2003)
Edición nacional/España: Basilisk: The Kouga Ninja Scrolls (Editorial Ivrea, 2022)
Dibujo: SEGAWA Masaki
Guion: YAMADA Futaro
Traducción: Kazusa Kanemoto
Género: Ninja/Acción
Formato: Rústica. 200 páginas. 9,00€

A ponerse hecho un Basilisko toca

El basilisco es una criatura mitológica de características reptilianas tan lleno de veneno que es capaz de matar con la mirada. Su nacimiento según cuenta la leyenda se produjo cuando un huevo amorfo de serpiente fue empollado por un sapo sobre un nido de estiércol, un ambiente mísero ya marcado por la ponzoña desde antes de su nacimiento.

De la misma forma le ocurre a los protagonistas de Basilisk, nacidos entre la guerra perpetua de la familia Iga y Koga, sus ojos son capaces de envenenar a cualquiera que perturbe su amor al más puro estilo de Romeo y Julieta. Es cuando el Shogun abre la veda rompiendo el tratado de paz entre ambas familiar y prometiendo que la superviviente a la contienda será la guardia real además de un porvenir de riquezas para sus descendientes por los próximos 1000 años.

La obra está adaptada de la novela escrita por YAMADA Futaro, de la cual además del manga se hizo una adaptación al anime que ha gozado de gran popularidad. Se realizó una segunda temporada de la misma tanto en manga como anime, la cual no cosechó el mismo éxito por la repetición de la fórmula. Una obra corta de 5 tomos para los amantes del género de acción ninja más puro y adulto.

Aunque empiece siendo una trama de conspiraciones políticas y tráfico de influencias, el punto fuerte y grueso de la obra son los combates entre los miembros de ambas familias por la supervivencia del clan. Variados en cuanto a recursos, técnicas, número de participantes, escenarios y giros de guion; siempre se presentan con una atmósfera muy oscura que no hace destacar al dibujo en toda su plenitud a mi modo de ver. Un dibujo pulido y detallado que ensombrece todas sus viñetas para sumir al lector en esta ambientación opresiva de batalla continua.

El principal problema que le veo al guion de Basilisk estaría precisamente en ese aspecto de conspiración para obtener el poder que promete el Shogun, ya que la organización de ambos bandos brilla por su ausencia y sus diálogos se pueden resumir en “Ahora voy yo”, “No, ahora me toca a mí” y “Quedaos en casita que estáis más guapos”.

Lo que impacta con la primera lectura es la variedad de diseño en sus personajes, cada uno contando con unas características físicas muy marcadas, sobre todo los de género masculino. Las kunoichis en esta obra acostumbran a ser seres que rezuman belleza y/o dulzura, relegando los cuerpos sobredimensionados o amorfos a los ninjas varones de ambas familias. Es un punto a favor en cuanto a la variedad en diseño de personajes si no fuera por hacerse evidente quienes son los personajes que más permanecerán en escena y a cuales les llegará una puñalada de kunai a la primera de cambio. Hay que ser guapo para ser prota.

También es digno de mención la edición que ha sacado Ivrea, con un papel y tonalidad que recuerda al pergamino. Sumado a las letras en relieve de brillante plateado lo vuelve una colección digna de coleccionista. La impresión de las imágenes es clara y nítida, aún con la cantidad de tinta por centímetro cuadrado en esta obra; y la traducción aunque básica, es correcta y mantiene el hilo de la acción en todo momento.

El primer tomo de Basilisk supone más una introducción a ambas familias siendo la acción más pausada y habiendo más diálogos entre los principales miembros de las familias que acción. Un preámbulo del aluvión de batallas que se avecina, con traiciones, habilidades secretas y mucha mucha sangre. Ya lo avanzábamos en los destacados de enero, pero si buscáis una serie de batallas duras, sangrientas y variadas con un trasfondo romántico de película de los 90, Basilisk os puede captar la mirada y envenenaros con sus páginas.

Lo mejor

• EL increíble diseño de los personajes y su trama de «solo puede quedar uno».
• El imaginario de habilidades ninja y cómo se usan en batalla.

Lo peor

• La ambientación es muy oscura, y como battle royale le falta un punto de tensión en sus diálogos.

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