Javier Vázquez Delgado recomienda: Saturn return 1, de TORIKAI Akane

Edición original: Saturn return (Shogakukan, 2019)
Edición nacional/España: Saturn return (Milky Way Ediciones, 2023)
Guion: TORIKAI Akane
Dibujo: TORIKAI Akane
Traducción: Gorka Merino
Formato: Rústica con sobrecubiertas. 232 páginas
Precio: 9€

Una vida de insatisfacciones y vacíos

«¿No será mi vida, en realidad, una mera sucesión automática de acontecimientos?».

Hay muchos tipos de mangas y autores. Algunos se centran en aventuras trepidantes que emocionen al lector y lo enganchen hasta el final de un largo periplo. Otros optan por argumentos sencillos, del día a día, con intención de sacarnos una sonrisa y ofrecernos un rato de lectura ameno. Otros se atreven a imaginar mundos que no existen y futuros que todavía no han llegado para hablarnos de nuestro presente, de nuestros problemas actuales. Otros prefieren asomarse a nuestro lado más oscuro, tomar como tema central lo incómodo, lo que se quiere ocultar porque duele o resulta desagradable, con intención de reflexionar al respecto y visibilizar determinadas cuestiones.

En este último grupo se encuentra TORIKAI Akane, una autora a la que merece mucho la pena leer, pese a lo crudos que puedan resultar sus mangas. Así lo ha demostrado con obras como Las mentiras de la profesora —publicada en español por Panini—, donde abordaba el tema de los abusos sexuales. Y vuelve a hacerlo con Saturn return, un drama sobre la pérdida en sus muchas acepciones, las expectativas y el tedio vital que acaba de llegar a nuestro mercado de la mano de Milky Way Ediciones. Serializado originalmente en la revista Big Comic Spirits de la editorial japonesa Shogakukan, se trata de un título duro —de una manera diferente a otros mangas de la autora—, pero muy sugerente.

Ritsuko Kaji sorprendió al mundo con su primera novela, un debut impresionante en palabras de sus editores y de la crítica. Sin embargo, desde que se publicó, no ha podido escribir nada más… Y es que hay algo que casi nadie sabe: esa historia que la llevó al éxito la ideó porque un amigo suyo, Atsushi Nakajima, así se lo pidió. «Escribe un libro que demuestre que estuve vivo», fueron sus palabras. Y le confesó, además, que moriría antes de cumplir los treinta años. Ahora Atsushi ha cumplido su promesa: un día, Ritsuko recibe una llamada que le comunica su muerte. La escritora, atrapada en un matrimonio rutinario e insatisfactorio y en una vida sin rumbo, emprende un viaje en compañía de su nuevo editor para descubrir más acerca de su amigo y las razones que lo llevaron a suicidarse. Tal vez de esa manera pueda volver a escribir.

Saturn return es una obra interesante en la que TORIKAI Akane explora el concepto de la pérdida en todas sus dimensiones. No solo habla de cuando un ser querido se va para no volver, sino también del vacío que deja en nosotros un amor que no llegó a dar fruto; una vida cómoda que, pese a todo, no nos gusta. Todas estas situaciones suponen, como comentábamos, perder algo de una u otra forma: a una persona, una oportunidad, nuestra propia identidad. Torikai refleja muy bien esa multiplicidad a través de su protagonista y sus vivencias. Cada detalle del manga cuenta y le sirve para caracterizar mejor a Ritsuko, su editor, su marido o Atsushi, para ahondar en la complejidad de esa pérdida y, a la vez, mantener la intriga del lector.

En ese sentido, es un título rico desde un punto de vista temático porque, aunque este sea el punto central de la historia, Torikai aborda otras cuestiones, desde el suicidio a los problemas de pareja y la maternidad, y eso lo hace una lectura aún más sugestiva.

Por otra parte, como ya hemos adelantado, la autora de Saturn return consigue suscitar interés gracias a su forma de contar. Los personajes están envueltos en secretos —conocemos algunos de ellos, de otros solo atisbamos la superficie, sobre otros aún falta bastante que saber—, y eso genera curiosidad. Queremos descubrir más sobre ellos y sus circunstancias, cómo la vida los ha llevado hasta el punto en el que están.

Alternando pasado y presente, escenas cotidianas sin importancia aparente —aunque suelen ser bastante más reveladoras de lo que podría parecer en un principio—, conversaciones sobre asuntos espinosos y sueños que generan preocupación e inquietud, Torikai construye poco a poco su obra. Un viaje para los personajes, para descubrir cosas sobre los demás o sobre ellos mismos, pero también para el lector, que los acompaña en su periplo y, en ocasiones, descubre cosas a la vez que lo hacen los protagonistas.

Por último, vamos a referirnos al dibujo. Al igual que en Las mentiras de la profesora, Torikai utiliza un trazo realista, muy acorde con lo que está contando y, además, muy expresivo. A veces, no le es necesario valerse de los bocadillos y el texto para narrar: basta con un primer plano, con uno más general, con un detalle, incluso con páginas completamente en negro. Son muchos los elementos que le sirven para dar mayor fuerza a los sentimientos de los personajes o a los acontecimientos que suceden a lo largo del primer tomo: la lluvia, los sueños, incluso la comida, la bebida y los objetos más cotidianos, símbolo de ese día a día anodino que es como una cárcel para Ritsuko o de su necesidad de escapar de su realidad. Dibujo e historia se complementan a la perfección.

TORIKAI Akane nos ofrece de nuevo un manga interesante, duro por los temas que se tratan en él y la manera en la que la autora los plasma: de forma sutil, aunque sin tapujos. El viaje vital en el que acompañamos a su protagonista, Ritsuko, acaba de comenzar, pero seguro que nos traerá sorpresas… El primer tomo deja con ganas de seguir la lectura y averiguar más sobre los personajes y su pasado. Tendremos que esperar un poco para saber el rumbo que Torikai le va a dar a su historia.

Lo mejor

• La riqueza temática del manga y las reflexiones de TORIKAI Akane sobre lo que supone la pérdida.
• La expresividad del dibujo y lo bien que la autora aprovecha los recursos gráficos con los que cuenta para narrar.

Lo peor

• La dureza de algunos temas y situaciones puede que eche para atrás a algunos lectores.

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